viernes, 24 de abril de 2009

No hace falta un Día del Libro sino leer

Estos tiempos serán definidos en el futuro como el del Gran Padre, porque es así como se comportan los estados, las instituciones nacionales, locales, internacionales, las familias, los grupos sociales, las redes sociales de todo tipo y hasta el último ser que tenga algún tipo de interés en un individuo. La sobreprotección es el mal del presente, y generará en el futuro sociedades aterradas donde la violencia será desmedida y la parcelación en grandes clanes será la única respuesta posible. Hemos pasado de la comunidad a la sociedad de masas, y de ésta a la Gran Sociedad donde todo está reglamentado y perfectamente encajado. Incluso algo tan natural como la literatura, la lectura, el primer destello de civilización que nos conformó a todos los habitantes del planeta como seres pensantes, se ha convertido en un despropósito. Hace falta que haya un Día del Libro, elegido azarosamente en la falsa fecha en la que murió Cervantes y supuestamente Shakespeare, y que fue alentado desde Cataluña porque coincidía con la fiesta patronal de Sant Jordi, esto es, San Jorge.
Renegamos del Día del Libro porque el libro no necesita que nadie le dedique más atención que una detenida lectura. Sea bueno o malo, pero leer. En el norte de Europa el índice de lectura de libros está entre el 60 y el 65%; en España, el 35%, y al menos ha subido porque antes era del 25%. Evidentemente hay muchos aspectos que inciden en ese hecho, pero desde luego ni el clima, ni la falsa y farisea cultura de la fiesta son excusa. Sólo los negados se escudan en que en España más vale salir a la calle y hacer vida latina. Que sepamos, ahora mismo, hay una temperatura media de 26º en el centro de Berlín, una ciudad poblada de terrazas en cada resquicio de acera, más incluso que en España, aunque parezca mentira. Y allí todo el mundo salía a tomarse algo. Y leen más. Así que menos fiestecitas absurdas auspiciadas por la ONU y más programas masivos de lectura, que la Gran Sociedad sea útil para algo más que tenernos a todos bien ataditos de pies y manos.

No hay comentarios: