lunes, 3 de mayo de 2010

Dos tortas por el precio de una

Primer guantazo: ha dimitido la directora de Arco, la misma que hasta hace unos meses decía que la crisis se había superado y que todo iba bien, que eso de la rebelión de las galerías era una manipulación y bla, bla, bla... Razones: colisión con los gestores de Ifema, políticos o puestos por políticos, con lo cual no les interesa tanto el arte como la posibilidad de darle rendimiento al invento; y por supuesto, la pasta, que no entra, que se aleja de Arco y de Madrid. Cuatro años han dado para mucho, para demostrar que no hay sector que la guillotina económica no descabece y que, las ferias de arte, como los equipos de fútbol, sólo funcionan si el presidente o el jefe se mantiene lejos del fútbol y deja hacer a los que saben. O puede que no, que sea simplemente porque hay ya tantos intereses que no deja de ser una sesión de bizantinismo cualquier cosa que lleve la etiqueta de oficial cerca del nombre. También podría deberse al agotamiento de la feria, necesitada de una urgente reformulación si quiere sobrevivir en el futuro. Igual éste es un primer paso, o no, eso ya veremos.

Segundo guantazo: a la Sgae, por lista. Ponen un circo y a estos pobres les crecen los enanos. Por no saber montarse mejor el negocio. Resulta que los ganadores de las 23 categorías de los Premios Max debían conocerse a las 21.00 horas de hoy lunes, pero algún listillo le dio a la tecla antes de tiempo y salieron publicadas horas antes de la gala todos los resultados. "Tomaremos medidas y se hará una investigación para saber qué ha ocurrido". Bonita frase, es la misma que suele decirse cuando hay un atraco, un asesinato, una filtración, un accidente o un desastre natural. Más leña al árbol que intentan tirar entre todos de la Sgae, incapaz de reaccionar ante la nueva era digital con otra respuesta que no sea recaudar dinero como lo haría el Fisco, sin amoldarse a los nuevos tiempos, protegiendo de verdad a los autores de la piratería. Empiezan a parecerse ya a los antiguos recaudadores de impuestos del Faraón, que cuando no había dinero o sacos de grano se llevaban a una hija o hijo del campesino a modo de pago en especias. En Inglaterra, en la Edad Media, los colgaban del árbol más cercano. Más que animadversión generan compasión: y los medios de comunicación se la tienen jurada a la Sgae, de la que más tarde o más temprano formaremos parte (sigh). Populismo y mala gestión se unen en la cacería. Un fallo en una edición descafeinada donde sólo triunfaron 'Urtain', de Animalario, y Blanca Portillo con su espectacular interpretación de 'Hamlet'.

No hay comentarios: