sábado, 27 de febrero de 2010

Qué es lo que NO es ciencia

Ponga un economista en su vida, pero para atarlo a un poste y darle latigazos.A buenas horas, mangas verdes de billetes. Los mismos que no fueron capaces de prevenir a nadie sobre la crisis mundial son los que ahora hacen de adivinos y le dicen a los demás lo que tienen que hacer. Son como los curas: hablan de lo que no ven y prometen paraísos indemostrables. Así que vamos a decirlo de una vez: LA ECONOMÍA NO ES UNA CIENCIA. Esperamos que las mayúsculas puedan transmitir nuestra indignación intelectual con esos chicos de traje y corbata que ni producen nada ni benefician a nadie. Los economistas ni pronostican, ni aciertan ni son capaces de experimentar y sacar resultados más allá de los síntomas obvios (si hay crisis bajan los precios para seguir vendiendo, no hace falta ser Galileo para darse cuenta de eso). 

No saben de qué van y todavía esperamos a un economista que sea capaz de seguir al pie de la letra el método científico y corroborar empíricamente nada. Porque la vara de medir es el método, no poner "ciencias" delante de las palabras para darles más empaque. Y encima tienen un Premio Nobel: ¿para qué, si todavía no han sido capaces de resolver los problemas estructurales del capitalismo, tan útil a corto y medio plazo y tan desastroso a largo plazo? A toro pasado todos somos sabios. Es antes cuando hay que decirlo, y torpedear a Gobiernos nacionales porque los intereses económicos de unos cuantos van en dirección contraria sería suficiente para mandar a un comando a asaltar las oficinas de esos "expertos" y hacerles un "Jimmy Hoffa". Furias aparte, ya lo dijo un insigne catedrático de Filosofía de la Ciencia que en vacaciones iba a dar clase a Oxford: "Ciencias sólo hay tres, y las demás son fulanas interesadas". 

PD: Y si algún economista quiere debatir, ya sabe cuál es nuestro email. 


2 comentarios:

Carlos dijo...

Aunque parezca que estoy tirando piedras contra mi propio tejado, he de admitirlo con la cabeza bien alta: Tienes razón.

Y puede que la autentica ciencia sea venderla artísticamente como tal, y que te paguen por ser un artista.

Anónimo dijo...

Los economistas venden humo. Humo de todos los colores. Yo no diría que es ciencia... Pero vender humo es un arte.

Santi